Alfarnate, el paraíso de la cereza El municipio situado en los 'Pirineos' de la Axarquía, tras un invierno seco y sin apenas heladas, prevé una producción histórica con 100 toneladas de cerezas. El cultivo de la cereza, cada vez más importante en la localidad axárquica de Alfarnate. El cultivo de la cereza, cada vez más importante en la localidad axárquica de Alfarnate. F. E. Fotos de la noticia Alfarnate es singular por muchos motivos. Además de albergar los únicos festejos de moros y cristianos del territorio más oriental de la provincia, de ser el pueblo malagueño situado a una mayor altitud –cerca de 1.000 metros– y de presumir de estar enclavado en el valle de los denominados Pirineos de la Axarquía, batirá sus registros históricos este verano con una producción de más de 100 toneladas de cerezas. Por este motivo se espera como nunca la novena edición del Día de la Cereza, prevista para el sábado 21 de junio. El primer teniente de alcalde y concejal de Turismo, Cultura y Fiestas, José Manuel Arrebola (PSOE), subraya que durante el periodo de dos meses que arranca en estos días, con la recolección de los cerezos, cerca de medio centenar de familias dedicarán buena parte de sus esfuerzos a erigir al municipio en auténtico «paraíso de la cereza». «La mayoría de las explotaciones son de carácter familiar. La venta se ciñe a la provincia y son numerosos los visitantes que entre junio y julio acudirán hasta Alfarnate para adquirir de forma directa, que es de la manera que mayor margen deja, esta deliciosa fruta». Arrebola explica que las cerezas de su municipio son preferidas a las de otras latitudes, por ejemplo a las de Cáceres, porque «son el doble de carnosas, jugosas y grandes». Las excepcionales condiciones meteorológicas del pasado invierno, con mínimas heladas y escasa lluvia, han disparado la producción. En la cooperativa local se apunta que de las 40 o 60 toneladas de 2013 prácticamente se pasará al doble. Un factor adicional es el progresivo aumento del número de árboles en producción existentes en el municipio, a pesar de que Alfarnate ha perdido un centenar de habitantes empadronados en los últimos meses, hasta quedarse en unos 1.100. El edil subraya que el cerezo es más rentable que cultivos tradicionales en el municipio como la cebada o el trigo. «Somos conocidos como el granero de Málaga, pero los agricultores han empezado a sustituir estos cultivos por la cerezas, los guisantes y otras variedades que sirven para alimentar al ganado. Todo parece ya más rentable que el trigo». También se produce un cierto relevo generacional, mediante la apuesta de algunos jóvenes por los cultivos hortofrutícolas de verano. Los productores explican que la venta directa de cerezas se realizará este año a una media de unos 2,5 euros por kilogramo, de manera que la facturación aproximada en el municipio, salvo sorpresa, rondará los 250.000 euros. Las explotaciones familiares, con una configuración básica de una hectárea, suelen generar unas 100 cajas de cerezas y aproximadamente 2.000 euros de facturación. Las autoridades manifiestan la condición de «ecológicos» de los cerezos de Alfarnate y que el municipio, situado «a unos 40 minutos por carretera desde Málaga», reúne las condiciones óptimas para los árboles, debido a que al año se registran casi 1.000 horas a menos de cinco grados de temperatura.